Una barco transformado en Iglesia en el Delta |

En la intersección del Río Carapachay y Paraná de las Palmas se encuentra un

un elemento que muchos no saben que es y llama mucho la atención, pues bien era la cúpula de una Iglesia.

La Iglesia Cristo Rey en todo su esplendor.

Pero no una Iglesia común sino una Iglesia Flotante que se había construido sobre un barco.
Esta historia comienza cuando el Rev. Padre Luís C. Isola se propuso que debía existir una Iglesia que navegara el delta y pudiera estar en distintos lugares para los fieles de esas Épocas.
Así que fue que le donaron una lancha a la que llamó ¨El Salvador¨, (donada por el Ingeniero Rómulo Ayersa en el año 1924.) con ella comenzó a recorrer el delta visitando a sus fieles, si bien la lancha no colmaba sus expectativas ya que seguía pensando en algo más grande, como una Iglesia, para sus propósitos evangelizadores.
Sus deseos fueron escuchados luego de llegar a los periódicos, así fue que tuvo la suerte de llegar a oídos de las autoridades del ministerio de Obras Públicas de la Nación quienes decidieron apoyar la iniciativa y llevar a cabo el proyecto. Fue primero Luis Dodero, administrador de la Cía. de Navegación Nicolás Mihanovich, aportó el casco y asimismo un campanario el que fue importado desde Inglaterra.
El presidente Agustín Pedro Justo dio la orden que se construyera con dichos elementos la Capilla Flotante Cristo Rey, fue en el astillero de Obras Públicas de la Nación, de la Isla Demarchi.

La iglesia Flotante se destacaba por su campanario de grande dimensiones.
Tenía 33 metros de eslora y tenía una capacidad para 150 fieles además del personal propio de sacristía y mantenimiento.
Tenía tres camarotes para los sacerdotes y una sacristía.
El 21 de Agosto de 1936 el Exmo. Señor Nuncio Apostólico, Monseñor Felipe Cortesi, bendijo la Iglesia Flotante “Cristo Rey”,
Al acto asistieron el presidente de la Nación Agustín P. Justo y su esposa, Ana Bernal, quienes, además , fueron los padrinos de la nave. Se hicieron presentes autoridades del gobierno del congreso y gran cantidad de personas que llegaban a las 4000 personas.
El 23 del mismo mes a las 10 horas se ofició en ella una misa solemne quedando en esta forma creada y convertida en realidad. En los días inmediatamente posteriores la iglesia recibió más de 100.000 visitantes.
La iglesia no poseía motores por lo que era remolcada por los distintos lugares del del delta por la lancha El Salvador, aquella en la que comenzó el Reverendo Sola a recorrer el delta, y de esa forma quedaba un tiempo en distintos lugares de nuestro Delta del Paraná
Emplazamiento actual de la cúpula.
El interior tenía diez ventanas ojivales que la iluminaban, 5 en cada banda, con motivos bíblicos y religiosos.
Detrás del altar había un gran cuadro que representaba a Nuestro Señor bendiciendo a la Nave-Iglesia. Este cuadro y toda la decoración pictórica habían sido realizados por el pintor Augusto Juan Fusilier (1891-1975), cuyas obras
pueblan muchos templos argentinos.

Vista del interior la pintura detrás del altar.

En procesiones, la iglesia Cristo Rey lucia sus bellas líneas en las aguas del Delta, una en el puerto de Buenos Aires fue seguida por varios vapores y cientos de embarcaciones.
En el año 1952 se consideró la posibilidad de colocarle motores que serían cedidos por la Armada Argentina, pero el proyecto no prosperó y la embarcación finalmente fue desguazada. El casco se convirtió en barco arenero.

Vista del interior de la Iglesia

Emplazamiento actual de la cúpula.

El campanario, elemento que se caracterizaba en la Iglesia, fue recuperado y hoy
se encuentra en un Destacamento de la Policía de Islas en el Río Carapachay y Paraná de las Palmas.
Actualmente muchos vecinos del Delta del Paraná recuerdan emocionados el hecho de ser bautizados, casados o haber asistido a misa a bordo de la nave que, al decir de una antigua lugareña, era “como de un cuento de hadas”.